Dicen que éramos muchas más que el 15M, las personas que ocupamos ayer las calles del centro de Madrid. A mí me parecían pocas. ¡Echaba de menos a tanta gente! Tantas personas excelentes, responsables, generosas... pero que todavía no han tenido tiempo de poner un poco de atención a este proceso ni a las realidades y amenazas a las que se enfrenta (*). Muchas otras quizá sí lo han tomado en consideración, pero creen que la situación no tiene arreglo o que no pueden hacer nada para ello. ¡Me disgustaría tanto que tuvieran razón! Hay, todavía, algunas otras personas que creen que no es para tanto, que ésta es una de tantas crisis pasajeras que ha sufrido la Humanidad, que el tiempo todo lo arregla... pero yo veo tantos síntomas de lo contrario... ¡Ojala que éstas sí tuvieran razón.(*) Esto me recuerda que el sábado estuvimos en el concierto de "Entredós", un coro de mujeres que quieren cambiar el mundo. Entre otras canciones relacionadas con el 15M, interpretaron L'Estaca. La emoción ya acumulada, en este momento rompió los diques y las lágrimas fluyeron descaradamente. ¡Y es que tiene tanta razón Lluis Llach...!: "Si tiramos fuerte, ella caerá (...) Si yo tiro fuerte por aquí y tú tiras fuerte por allá, seguro que cae, cae, cae, y nos podremos liberar"... Pero no nos ponemos a tirar ni tú por aquí, ni yo por allá. La estaca estará ya bien podrida, pero bien asentada y con la gente organizada en torno a ella sosteniéndola, de modo que no nos ponemos a tirar... Por si fuera poco, los "abuelos Siset" se han ido marchando y a los que hemos ido ocupando sus puestos nos quedan muy poquitas fuerzas.
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